El telón de la temporada dejó consumados los descensos de dos equipos: el VfL Bochum y el Holstein Kiel perdieron la categoría y jugarán en la segunda división la próxima campaña. Para el Bochum, un histórico del Ruhr, la caída se confirmó tras una campaña para el olvido en la que terminó último en la tabla. Curiosamente, los azulones se despidieron con una victoria 2-0 como visitantes en la última fecha, gracias a un doblete del neerlandés Myron Boadu. Fue apenas su segundo triunfo en todo el 2025, luego de aquella recordada sorpresa ante el Bayern en marzo. Demasiado poco para evitar el descenso tras cuatro años en la máxima categoría.
El caso del Holstein Kiel era más esperado. Recién ascendido por primera vez a Bundesliga esta temporada, el modesto club del norte sufrió el rigor de la élite. Finalizó en penúltimo lugar, pagando caro su falta de pegada ofensiva y experiencia. Ni siquiera la llegada de un nuevo entrenador en abril logró cambiar el rumbo, y el Kiel se despidió de primera con una derrota contundente en casa en la jornada final.
Así, Bochum y Kiel se unen al amargo club de los descendidos. Sus aficiones, no obstante, mantuvieron la dignidad: en Bochum cientos de hinchas despidieron al equipo con cánticos de apoyo pese al revés, prometiendo volver más fuertes. Ambos clubes tendrán que replantearse muchas cosas en verano para buscar el ascenso y regresar a la Bundesliga en un futuro próximo.