El Borussia Dortmund aseguró su boleto a la próxima Liga de Campeones completando una remontada notable en el cierre de la Bundesliga. Bajo la conducción del técnico Niko Kovač, el conjunto aurinegro pasó de la mitad de la tabla a finalizar en cuarta posición gracias a un sprint final de cinco victorias al hilo. En la última jornada, Dortmund cumplió goleando 3-0 en casa a un rival ya descendido que sufrió una expulsión temprana, resultado que confirmó su regreso a la élite europea.
La transformación del Dortmund en los meses recientes fue asombrosa. Kovač, quien tomó las riendas en febrero con el equipo hundido en el 11.º puesto, supo imprimirle carácter competitivo y equilibrio táctico a la escuadra. Figuras como Julian Brandt y Emre Can elevaron su nivel en el tramo final, mientras la afición del Signal Iduna Park recuperó la ilusión fecha a fecha. El premio llegó con la clasificación a Champions, resarciendo en parte una temporada que pintaba para el olvido.
Para un club acostumbrado a pelear los primeros puestos, volver a la Liga de Campeones era un objetivo ineludible. Dortmund lo consiguió contra pronóstico, remontando posiciones con garra y buen fútbol. La directiva ya anunció su apoyo a Kovač de cara a la siguiente campaña, confiando en que esta late rápida reacción sea el cimiento de un proyecto más ambicioso.